1349_ORTHOS YOGA AVANZADO teoria y practica

ORTHOS

LAYA YOGA

Además, está en el propio corazón del Laya-Yoga la noción de kun dalini-shakti, el poder serpentino, que representa la fuerza vital universal exactamente como se manifiesta en el cuerpo humano. El despertar y el manejo de esta fuerza también constituye el princi pal objetivo del hatha-yoghi. El Laya-Yoga puede ser comprendido como la fase superior, meditativa, del Hatha-Yoga. Al paso que la fuerza de la kundalini despierta y sube desde el cen tro psíquico energético de la base de la columna hacía la coronilla de la cabeza, absorbe energía vital de los miembros y del tronco. La temperatura del cuerpo cae sensiblemente en los miembros y en el tronco, mientras la coronilla parece quemar. La fisiología de este proceso aún no se comprende. Sin embargo, subjetivamente, los yoghis sienten una progresiva disolución de su estado ordinario de ser hasta identificarse de nuevo con el “Sí Mismo” (Atman) eterno que no conoce límites corporales o mentales. Además, en el clímax de la disolución microcósmica, la respiración para automáticamen te o bien se hace imperceptible. El proceso de absorción es común en todas las formas meditativas de Yoga, consiste en el alejamiento progresivo del mundo exterior y la amplia unificación del ambiente interior. Entretanto, los practi cantes se fijan especialmente en el aspecto psíquico energético de este proceso.

La disolución del universo. El término laya significa “disolución” y se refiere a la “ocupación total” de la mente en la meditación. Deriva de la raíz li , que signi fica “disolver” o “desaparecer”, pero también “adherir” y “perma necer preso”. Los laya-yoghis buscan disolverse en la meditación a través de la adhesión única y exclusiva al “SÍ Mismo trascenden tal”. Buscan trascender los vestigios de la memoria y todas las experiencias sensoriales mediante la disolución del microcosmos de la mente, en el trascendente Ser-Conciencia-Bienaventuranza. Su objetivo es desmontar su universo interno por medio de la con templación intensa hasta que quede solamente la única Realidad trascendente, el SÍ Mismo. El Prashna-Upanishad afirma que los diversos principios de la existencia (elementos materiales y sutiles, los sentidos, la mente, el intelecto superior, el ego, la conciencia (citta) y la fuerza vital) han de ser reconocidos como aspectos del supremo Sí Mismo. Para lograrlo, los laya-yoghis usan el modelo del cuerpo sutil (suk shma-sharira) con sus centros energéticos (chakra) y sus corrien tes o canales (nadis).

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